
¿Quieres comprar una casa en Italia por un euro? Así lo hacen posible en Sicilia, sin trámites ni condiciones
Antonino y Carmelo Cuschera han vendido más de 50 casas por un euro en pueblos sicilianos despoblados. Lo hacen sin intervención de ayuntamientos, sin comisiones, y gestionan todos los trámites legales. “Lo hacemos por amor a nuestra tierra”, afirman.
Desde que surgió el concepto de las casas italianas por un euro, se ha repetido un patrón: pequeños pueblos con problemas de despoblación intentan revitalizarse atrayendo a nuevos residentes mediante la venta de viviendas antiguas a precios simbólicos.
Cuando se anuncia una nueva venta, suele producirse una breve fiebre de compradores ansiosos por adquirir una propiedad barata.
Aunque muchas de estas casas desaparecen rápidamente del mercado, aún existen viviendas deterioradas en regiones poco conocidas de Sicilia.
Eso sí: hay que saber dónde buscar. Y en eso se especializan Antonino y Carmelo Cuschera.
Los hermanos Antonino y Carmelo Cuschera han creado su propia agencia para poner en contacto a vendedores de propiedades privadas con compradores en busca de gangas. | Antonino Cuschera vía CNN Newsource
Estos hermanos sicilianos han dedicado su tiempo a localizar propiedades en mal estado y ponerlas a la venta por un euro (alrededor de un dólar) a través de su agencia inmobiliaria Vero Affare —que en italiano significa “buen trato”—.
A diferencia de otros programas impulsados por municipios, estas ventas no requieren garantías, depósitos ni plazos para remodelaciones.
“Aquí no hay ayuntamientos involucrados, es una transacción entre privados y nosotros intermediamos”, explicó Antonino, de 55 años, exproductor de miel y cultivador de melones.
“Los antiguos dueños que quieren deshacerse de propiedades familiares abandonadas nos contactan y nosotros publicamos los anuncios con fotos, pero no vendemos sin que el comprador vea la casa en persona”.
Lugares con encanto, pero sin habitantes
Con base en Favara, los hermanos —Antonino y Carmelo, de 58 años y experto en tecnología— recorren pueblos sicilianos afectados por la emigración, donde saben que hay viviendas disponibles.
“Buscamos casas de un euro hablando con vecinos que ven estas propiedades como una carga. Repartimos volantes para animarlos a desprenderse de estos inmuebles, y gestionamos todo el papeleo”, cuenta Antonino.
Esta vivienda de la localidad de Sutera se encuentra entre las propiedades a la venta por un euro. | Antonino Cuschera vía CNN Newsource
El mantener estas propiedades implica impuestos municipales para los antiguos dueños, lo que los motiva a deshacerse de ellas incluso a precios simbólicos.
En los últimos tres años, los hermanos han vendido más de 50 casas por un euro, principalmente a extranjeros del norte de Europa y a ucranianos que huyen de la guerra.
Cada semana suben nuevas propiedades por un euro a su sitio web, además de otras más económicas listas para habitar, desde 20.000 euros (unos 22.400 dólares).
Entre los pueblos donde han encontrado estas viviendas están Sutera —nombrado uno de los más bellos de Italia—, Campofranco, Acquaviva Platani y barrios antiguos de ciudades como Caltanissetta y Agrigento.
Las casas disponibles suelen ser pequeñas, de los años 30 y distribuidas en varios niveles. Algunas son más grandes, antiguas residencias de campesinos con 200 m², incluyendo espacios antes usados para ganado.
Una de las ofertas más recientes es una casa de piedra de dos pisos y cuatro habitaciones en Sutera, con garaje y balcones que dan a la plaza principal.
Por amor a Sicilia
En Caltanissetta, en el corazón de Sicilia, se ofrece por un euro un antiguo palacio de 200 m² ubicado en un barrio que data de la conquista árabe del siglo IX. Tiene tres pisos y varios balcones cerca de la basílica del pueblo.
Los hermanos esperan que la mayoría de los compradores restauren las viviendas —con remodelaciones mínimas desde 20.000 euros—, y se ofrecen a conectar con arquitectos, notarios y equipos de obras.
Aseguran que no buscan lucrar. “No cobramos comisión. Lo hacemos por amor a nuestra tierra”, afirma Antonino. “Duele ver cómo tantos pueblos sicilianos, que alguna vez florecieron, ahora están en decadencia”.
Antes de listar una propiedad, deben confirmar que los dueños tengan todos los documentos, especialmente prueba de propiedad y consentimiento de todos los herederos, como lo exige la ley italiana.
Los hermanos con algunos de sus clientes recientes. | Cortesía de Antonino Cuschera vía CNN Newsource
“Muchas casas están divididas entre varios parientes. A veces hay que rastrear a los herederos por todo el mundo para que firmen documentos de sucesión”, explica Antonino.
Carmelo se encarga de buscar genealogías familiares en archivos municipales y parroquias. Si hay que firmar un acta de sucesión por un propietario fallecido, los compradores deben pagar unos 300 euros por trámite. Por ejemplo, si hay tres dueños o herederos, se pagan 900 euros.
Por otros 350 euros, los hermanos actualizan planos y los inscriben en el catastro local.
“Lo que nos diferencia de las ventas organizadas por autoridades es que son los propietarios quienes acuden a nosotros. Les ayudamos con todo el papeleo que los municipios no tienen recursos para gestionar”, dice Antonino.
Prefieren trabajar con casas que tengan uno o dos dueños identificados para evitar trámites complejos.
Mucho más que una ganga
A pesar del precio simbólico, los hermanos aseguran que el valor de estas casas va más allá del dinero. Se encuentran en pueblos medievales o barrios históricos, lejos del turismo masivo y con vistas privilegiadas.
De hecho, muchos compradores con recursos eligen estas casas en ruinas antes que las listas para habitar. Antonino recuerda una clienta que iba a comprar una casa lista para entrar, pero al ver una ruinosa con terraza y vista panorámica, cambió de opinión: “Podía disfrutar un rincón del paraíso desde ahí”, relató.
“Muchas veces vienen buscando una casa sin necesidad de refacción, pero terminan eligiendo una que sí requiere trabajo. Es que son más bellas y atractivas”.